El equipo Juvenil logra una de las dos plazas de ascenso a 1ª Autonómica al resultar SUBCAMPEÓN DE LIGA en una increíble última jornada.

Después de su victoria por 6-0 ante Puerta de Madrid, debía esperar el pinchazo de Atlético Villalba que, además de conocer nuestro resultado al haberse jugado un día antes, jugaba en casa contra Collado Mediano, 9º clasificado y sin aspiraciones de ningún tipo.

A pesar de ello, Collado Mediano, mostró todas las vergüenzas de los villalbinos, castigándoles severamente con un doloroso 0-2 que les deja en 2ª división un año más.

Se da la circunstancia de que el equipo de Villalba, sabedor de que nuestro equipo llegaría mucho mejor a la recta final de la liga, empleó todo tipo de artimañas, tanto en su campo (hubo de intervenir la Guardia Civil) como en los despachos, cursando denuncias contra el Sorolla por supuestas alineaciones indebidas que el propio Comité de Disciplina archivó de inmediato al ser totalmente falsas.

Nos preguntamos cómo Atl. Villalba no ha sido apercibido de alguna manera, habida cuenta de que sus intenciones eran, como mínimo, sospechosas pues ni daban nombres ni datos de los infractores y no permitiendo defendernos al hacerse a nuestras espaldas y sin previo aviso. Allá cada cuál con lo que entiende por fair-play.

Pero hablemos de los subcampeones. Durante toda la temporada los chicos dirigidos por los dos Alejandros (Blanco y Marco), han trasladado perfectamente al campo la filosofía del club de no dar un partido por perdido, salir siempre a competir y de obligar al rival a sudar la camiseta si quiere ganar.

Hay que añadir que la mayoría de los jugadores son entusiastas entrenadores de los más peques del colegio, lo que explica que hayan puesto todo el corazón por sus compañeros, por el club y por el Sorolla.

El equipo ha salido vencedor en los campos más complicados de la liga y ha resultado el máximo goleador y uno de los menos goleados. Tratándose del Grupo 1, en el que se encuadran todos los equipos de la Sierra de Madrid, el mérito es inmenso como bien sabe cualquier aficionado al fútbol madrileño.

Para colmo, las circunstancias en las que se ha entrenado (campo de tierra) y competido (siempre en campo «prestado») y sin poder contar con un portero de referencia durante meses hace del ascenso un auténtico milagro.

No podemos olvidarnos de las familias ni de los Sorolla Fighters, que sábado tras sábado han creído en el equipo y han logrado formar un grupo de fans de apoyo incondicional para el Juvenil pero también para todos los equipos y deportes del club.

No sabemos si este ascenso servirá para garantizar la continuidad de la plantilla pero al menos sí queda una cosa clara: SE HIZO JUSTICIA. SOMOS DE PRIMERA!!! VAMOS SOROLLA!!